Vivimos regidos por una serie de normas impuestas por la sociedad, que adoptamos como propias a veces sin saber siquiera si estamos de acuerdo con ellas. Cosas que mamamos de chicos y hoy las tenemos completamente asimiladas. ¿Una mujer es considerada una puta por tener sexo con muchos hombres y un hombre es un campeón por hacer lo mismo con muchas minas? ¿Una persona gorda es fea? ¿Hay que estar a la moda? ¿No hay que tirarse un pedo en público? ¿Está mal decir TETA y no decir NARIZ?
¿Nadie se cuestiona éstas cosas?
Hagan lo que quieran. Desátense. Vivimos en éste mundo, en éste sistema y no podemos huir de él. Pero sí podemos vivir la vida lo más plenamente posible, haciendo oídos sordos a los juicios de los pobres idiotas que creen en la ética y la moral.
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