miércoles, 9 de noviembre de 2011

to live a good life.

A veces, uno reflexiona horas, días y hasta meses, sobre determinados momentos. El eterno "¿Por qué?". Pero hay instancias en las que no llegamos a ninguna respuesta. Habiendo pasado talvez muchísimo tiempo, mucha agua bajo el puente. Quizás, habiendo crecido y cambiado la perspectiva de las cosas. De igual manera, a veces simplemente no sabemos el por qué de ciertas cosas. Algunas ocurren sin ninguna razón o talvez sí la haya, pero jamás la conoceremos. También puede darse que la conozcamos recién después de muchísimo tiempo. O sólo tendremos muchas hipótesis por el resto de nuestras vidas. Pero, ¿es tan importante esto? ¿Será que siempre hay una causa por la cuál las cosas ocurren? ¿O será que, a veces, las cosas pasan porque pasan?

Pensando de esta manera, tomamos a lo complejo como simple. Siendo conscientes de su complejidad y entendiendo cuánta incidencia tiene uno en el desencadenamiento de los hechos. En ciertos momentos es mucho. En otros, poquísimo. Hay momentos en los que uno debe dejarse llevar y no preocuparse tanto por las causas o por encontrar algún tipo de responsable. Afrontar la realidad tal cual es y simplemente dar lo mejor de uno.

Hoy me paro frente a esta realidad. Siempre dije que en cuanto yo ponga todo mi esfuerzo, no importa cuáles sean los resultados. Al menos, voy a llegar hasta el último momento sabiendo que di todo de mí. Después, si todo ese trabajo no logra el resultado esperado, por lo menos se que lo intenté. Sino, la duda podría acecharte hasta el último de tus días. No tiene sentido sobreexigirse ni pensar demasiadas veces algunas cosas. No hay razón para forzar momentos ni para ponerse triste cuando no ocurren ciertas cosas.

Hay que vivir la vida de la manera más plena posible. Entendiendo que siempre habrá buenos y malos momentos. Que siempre habrá un llanto para que exista una risa. Que siempre van a haber cosas que escapen a nosotros. Como también, las cosas en las que sí tenemos poder no hay que dejarlas escapar. Somos dueños de nosotros mismos, de nuestra mente y de nuestro ser. Con eso, basta y sobra.

Live a good life !


(Grammar I: live is a pure intransitive verb, that can only take a cognate object, which is etymologically related with the verb, like in this case or to dream a bad dream).
Jaja, me estoy enfermaaaando.

No hay comentarios.: