Me desperté relativamente temprano (9:30 A.M). Miré el reloj y caí en la cuenta de que hoy no iba al colegio porque estaba suspendida (flojo castigo, gracias Consejo de Convivencia te lo agradezco de corazón). Decido entonces cerrar nuevamente los ojos. Pero después de media hora mi vegija empezó a pedir desesperadamente que me levante de la cama.
Me levanto entonces de la cama, en contra de los deseos de mi gato de seguir duermiendo sobre mi brazo. Me baño antes que nada, como para despertarme y abrir un poco los ojos.. para refrescarme. Cuando abro la ventana del baño me encuentro con un diáfano cielo azul. "Que lindo día". Y me bañé con la ventana abierta (amo hacerlo). Tardé media hora dentro de la ducha (lo cual para mí es una eternidad ya que mis duchas oscilan entre los 3 y los 7 minutos, sin exagerar), sólo para disfrutar el no necesitar apurarme. Dejar que el agua recorra mi cuerpo (diganme si existe algo más relajante que eso), cerrar los ojos, y sentir la leve brisa que entraba por la ventana. La brisa matutina.
Luego de deambular un rato desnuda por mi casa, sólo para sentir el simple y enorme placer de estar sin ninguna ropa, opté por vestirme ya que todavía estoy medio enferma y no es un plan seguir empeorando. Agarré la netbook y me fui a la cocina. La amada cocina. Lo que me gusta de este lugar es que es la habitación con mejor iluminación de la casa. Toda mi casa tiene una iluminación increíble, pero por la ubicación y por el gran ventanal que tengo acá, la cocina es la mejor iluminada de todo el departamento. Además es amplia, estoy cerca de la heladera (crucial), tiene un baño propio (crucial también), tengo enchufe para la netbook, tengo una TV si quisiera mirarla (no es el caso) y tengo el "departamento" de mi gato, donde le pongo de comer y donde hace sus necesidades (me sirve tenerlo cerca porque sino me cuelgo, se caga de hambre el Chango y se llena de olor a mierda la cocina). En fin, aguante la cocina.
Una vez acá, mientras se enciende la netbook me preparo el clásico capuccino de la mañana. Acompañado por las clásicas frutigran (hoy, con lino y chía). No sé por qué, pero se me da por agarrar la cartucherita del baño (donde se alojan pincita, alicate, y esas cosas que no sé como se llaman ni me interesa) y me corto las uñas del pie. Ésas cosas que hacés sólo cuando sabés que si no lo hacés en ese preciso momento que estás completamente relajado con el tiempo, no lo hacés jamás.
Ya arrancada la netbook, lo primero que abrí (como siempre) es mi viejo y fiel amigo, el Winamp. No sé por qué tampoco, pero instintivamente puse este tema que les dejo a continuación para que se deleiten. Ahora escribiendo esto miro la hora, y me doy cuenta de que la mañana ya se me pasó volando y no hice un carajo. Tengo que escribir dos composiciones para inglés, tengo que practicar Use of English, tengo que hacer un "trabajo de reflexión" para el colegio (esto sí que jamás lo voy a hacer), tengo que hacer un trabajo de literatura, otro de química y otro de historia.
Pero por lo menos, ésta inútil mañana me sirvió para estar de buen humor. Así que, de inútil no tuvo nada. Necesitaba empezar bien el día para terminarlo aún mejor en el recital que me espera hoy en Costanera sur (a esto le dedicaré otro post).
Deleitense con el mejor cover del mundo.
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