jueves, 14 de junio de 2012

Unique

Hay algo de lo que todavía no estoy del todo segura: ¿el estereotipo de mujer está total y completamente distorsionado, las generalidades ya no sirven de absolutamente, nada dada la complejidad de la mente humana o yo soy un "bicho raro"?

Yo voto por la segunda, por una cuestión muy personal, ya que desde que tengo memoria que me niego a aceptar cualquier tipo de argumento que se base en una generalidad. Y no lo hago de caprichosa, sino que, verdaderamente creo que la mente humana es demasiado compleja para una generalización. Por ello es también que no creo en la psicología. Tal vez el problema de las personas es que no pueden dejar un misterio sin resolver, tiene, pensaran, que haber siempre una fórmula a seguir. Yo soy una persona amante de la lógica y la racionalización; me encanta cuando me dicen esto es así y no hay más vuelta que darle. O al menos eso creía.

Sin saber cómo, la vida me fue llevando por el otro lado. Por el lado de lo abstracto y arbitrario. Heme aquí, en el estudio del lenguaje, campo de lo arbitrario si los hay. Heme aquí, escribiendo día tras día sobre el amor, las personas y la sociedad, donde todo es subjetivo. Supongo que hay momento en el que hasta el ser más racional debe entender que no hay lógica ni fórmula ni ecuación mágica. No existe un modelo, un estereotipo, de manera natural. Lo que existen, son figuras creadas por nosotros mismos como sociedad.

Figuras que creemos verdaderas y seguimos al pie de la letra. Y quienes no la seguimos caemos en esa incertidumbre: ¿estaré loca? ¿Tendría que haber nacido hombre? ¿Tendré que cambiar? Cuando en realidad, de manera natural, cada uno debería desarrollar su personalidad y estilo de vida de la forma que mejor le parezca. Con rasgos conscientes e inconscientes que nos guiarán en esa formulación de uno mismo. Pero sin limitarse por aquella imagen impuesta que tenemos. Supongo que el problema radica en la parte inconsciente. En como, sin uno darse cuenta, sigue esos mandatos impuestos y luego cree que es uno mismo el que maneja la situación. Y es que nacemos en sociedad y es difícil escapar a ciertas cosas.

Incluso yo, que me creo fuera de todo estereotipo de mujer, tengo ciertas concepciones que detecto como culturales, sociales y que no me pertenecen quizás ideológicamente. Esas pequeñas cosas que creemos que no tienen importancia. En el hecho de pensar que un hombre debe pagarnos en la primera cita o que nos abra la puerta de un lugar y no al revés. En la acción cotidiana de mirarse al espejo e imaginarse con kilos de menos, creyendo que esa es la figura deseada, cuando tal vez, en fondo recóndito de tu ser, estás total y completamente satisfecho con tu cuerpo. Podría enumerar decenas, pero haría esto más largo de lo deseado, dado que ya me explayé bastante.

Finalmente, no creo ser un "bicho raro". Creo que en esencia todos lo somos. Y quienes no lo son, no lo son porque no quieren. Porque se metieron en la cabeza que tienen que ser de tal o cual forma y ya no pueden salir de ello. Si aún no te ocurrió a vos, tomá las precauciones correspondientes. Está bueno ser distinto, único.

Pensarán que la foto de Tonto y Retonto no tiene absolutamente nada que ver. No sé, para mí sí. Piénsenlo.

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