martes, 25 de agosto de 2009

Cry Baby .

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A medida que pasa el tiempo, las palabras se me acaban..
se me agotan las ganas de pensar el por qué de las cosas.
Simplemente, me voy deteriorando.
Voy caminando, cada vez más despacio..
cada vez más cansada.
Son los momentos en los que uno necesita ver algo allá a lo lejos, en el horizonte,
algo que le llame la atención, y lo haga volver a su paso firme..
algo que nos de ganas de seguir, para poder llegar.
Pero, cuando uno no ve nada hacia adelante,
y lo único que ve, son como las cosas, buenas y malas, van quedando atrás..
no sólo no dan ganas de seguir,
sino que nos dan ganas de volver corriendo.
Ya no se trata de obstáculos, de vicisitudes..
se trata de no ver nada más allá, que anime a alguien a ir hacia adelante.
Se trata de sentir que uno ya no tiene un propósito en la vida,
que es inútil, inservible.
Sentir que uno no es dueño de su vida,
que no es capaz de cambiar el rumbo de su destino,
que no es posible dar vuelta la situación en la que uno se encuentra,
que no es factible salir del pozo.


Y no estoy hablando de depresión, ni de tristeza.
Estoy hablando de la sensación de sentirse vacío..
esa sensación de que nada que podamos llegar a hacer nos va a dar satisfacción alguna.
Ese sentimiento de desgano permanente,
de no sentir la voluntad de hacer nada por nada,
de no tener ganas suficientes como para levantarse, y seguir.
Es ese momento en el que sentimos que esas "ganas" y esa "voluntad" se fueron desvaneciendo de a poco,
y que en ese instante, ya desaparecieron por completo.
Ese nudo permanente en la garganta,
esa molestia constante ante todo y todos,
esa pesadez en el cuerpo que no nos deja caminar,
ese aire denso que no nos deja respirar normalmente,
ese dolor de cabeza intermitente,
ese augero en el medio de nuestra alma.

Lamentablemente cuando anací no me dieron un manual
"COMO SUPERAR SITUACIONES DE NUDO EN LA GARGANTA"
así que no sé muy bien que se hace con este vacío que nos queda en el interior..
porque, llenarlo de comida no sirve.
Y esperar sentada en un rincón a que mágicamente todo cambie, tampoco.
Lo único que sé, es que afrontarlo es siempre la mejor opción pero..
¿Cómo salir vivo de la batalla?
Es una pregunta a la que aún no pude encontrarle respuesta..

2 comentarios:

Dann____ dijo...

Quizás la forma de salir vivo de la battalla-o estarlo aunque muchas veces no nos parezca- ¿es pensar qué no hay batalla? ¿y qué simplemente somos uno?...No me gusta mucho mi positivismo en los días no frios de Invierno...Saludos!

Diego Jurado dijo...

¡Vaya! Me impresiona,como siempre, lo profundo, y la forma. El desasosiego de tus palabras lleva a a la melancolía y te deja un regusto amargo.
¿Cómo puedes? Mirando, buscando, ayudándote, ayudando.
Un beso.
Diego