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Es increíble como no sólo somos parte del mundo capitalista,
no sólo compramos sus productos,
no sólo admiramos su forma de vida,
no sólo reproducimos su sistema de vida,
no sólo copiamos sus inexistentes valores..
sino que, como si no fuera suficiente,
copiamos sus tradiciones vacías,
las cuáles no nos significan nada.
Mañana, 25 de diciembre, se festeja la navidad.
La gente compra miles de regalos,
y pone un arbolito, y adornos
que ni siquiera se corresponden con nuestra época del año,
ya que si fueron capaces de notarlo,
los adornos de navidad tiene NIEVE
(tenemos la particularidad de no sólo copiarnos,
sino de hacerlo mal)
Los niños juegan con la pirotecnia,
los grandes también.
La gente se emborracha y maneja autos,
las familias se juntan
y brindan por el nacimiento del niño Jesús.
Todos en una mesa enorme,
riéndo y hablando con sus bocas repletas de comida.
Sonriéndole a aquella prima que tanto odian,
a aquella cuñada que no soportan.
Tragando bocados enormes de salamín picado fino,
y tomando sorbos estrepitosos de la sidra más barata del mercado.
Comiendo turrones y pan dulce,
mientras hacen 30 grados de calor.
Decenas de pobres hombres disfrazados de Papá Noel.
Un Papá Noel, que obviamente no está en el polo norte,
aunque su ropa diga lo contrario.
Copiamos de nuestros amigos del norte,
la navidad, el halloween.
Estas fechas, aprovechada spor los comerciantes,
en las que todo es más caro.
Vivir es más caro.
Respeto las religiones,
las costumbres,
y las tradiciones de todo el mundo..
cuando son propias.
Cuando son el fruto de una cultura propia.
Pero copiar fiestas,
es de lo más patético.
En estas fechas me dan muchísimas ganas de irme al medio del campo.
